Seguro que has oído mil veces que los gatos son las mascotas más limpias que existen, ¿verdad? Te confirmamos que a esa afirmación no le falta razón, ya que además de ser importante para su salud, la higiene forma parte del carácter y forma de ser de los felinos.
Ellos son los primeros interesados en su imagen y, por eso, tienen una serie de hábitos de higiene que no descuidan. Además, hay una serie de pautas complementarias de limpieza que tienen que formar parte de vuestra rutina habitual. Te las contamos aquí:
El arenero, siempre perfecto
Es el lugar donde hacen sus necesidades y hay varios aspectos importantes que no podemos olvidar como la ubicación, el tamaño y la limpieza. Procura que esté colocado en un lugar tranquilo y alejado de su comedero y no lo muevas de sitio si no es necesario. También es fundamental para que tenga el espacio necesario para estar cómodo. Por último, recuerda limpiarlo a diario. Si ves que tu gato deja de utilizarlo o hace sus necesidades fuera, puede ser que el arenero esté sucio, que tu mascota quiera llamar tu atención o que tenga algún problema de salud.
Un pelo suave y sano
Cepillarle cada día es muy importante para mantenerlo limpio y que no desarrolle problemas dermatológicos. Además, al quitarle el pelo muerto, evitarás que trague bolas de pelo. Y, lo más importante, ¡a los gatos les encanta! En función de si tiene pelaje corto o largo, tendrás que utilizar un tipo de cepillo diferente. En nuestra sección de mascotas podemos aconsejarte sobre el mejor para tu mascota.
¿Ducha sí o no?
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de los gatos. Los felinos se asean a diario lamiéndose el cuerpo con la lengua. Aún así, un baño de forma regular es bueno para conseguir una limpieza a fondo y mantener su piel sana. Al bañarle, procura siempre que el agua esté calentita (a un máximo de 38º) y utiliza un champú específico para gatos, ya que éstos tienen el PH diferente del de los humanos y un champú corriente puede darles problemas. Tras la ducha, ¡siempre un buen aclarado! No dejes restos de champú, ya que al lamerse podría ingerirlos. Además, existen baños «en seco» con los que le causamos menos estrés.
Los parásitos ¡a raya!
Uno de los problemas más habituales, sobre todo en primavera y otoño, son los parásitos. Las pulgas y garrapatas se sienten “en su salsa” entre el pelo de un gato, por lo que tienes que tomar medidas para que tu mascota no tenga estos indeseados visitantes. Si tu gato ya está infectado, no sólo te servirá con un spray antiparasitario para acabar con ellos sino que necesitarás las pipetas o los collares.
Uñas afiladas… y cortas
A los felinos les encanta tener las uñas afiladas y poder marcar su territorio con ellas. Como ya te comentamos en el post anterior, un rascador puede ser la mejor solución para que no estropee tus muebles. Pero no vale con que las afile, las uñas también tienen que estar cortas, tanto por salud como para evitar arañazos cuando juegas con él. Solo necesitarás un cortaúñas especial, un poco de paciencia y darle unos cuantos mimos para que esté tranquilo, ya que suele ser un momento al que los gatos tienen miedo.
Esperamos que estas pautas de limpieza te hayan resultado útiles. Recuerda que en nuestra sección de mascotas los mejores expertos en animales están a tu disposición para ayudarte en todo lo que necesites. ¡Estamos abiertos los 7 días de la semana!